ETERNO PRESENTE En el Eterno Presente no hay dolencia ni indolencia, sino sólo la sapiencia de gozar perennemente. No hay frente que nos afrente, ni ciencia de la inconsciencia; ni tampoco diferencia o indiferencia que cuente. No se encuentra en el Eterno Presente nada de cuanto pudiera causar dolor. Ni anarquía ni gobierno. Sólo el Espíritu Santo de la Dicha y el Amor. Jesús María Bustelo Acevedo
No hay comentarios:
Publicar un comentario